La Zona Franca de Sevilla, situada en el sur de la Península Ibérica y en la capital económica, política y administrativa de Andalucía, ofrece unas oportunidades empresariales inigualables, ya que dispone de unas excelentes vías de comunicación y una situación estratégica de unión entre el Mediterráneo y el Atlántico, que la convierten, junto a las ventajas fiscales en un marco idóneo para la inversión de capital.